Volvemos a ver a Kendra Sunderland en BlackedRaw, una serie o línea de Blacked que busca el opuesto a esos sets neutros, generalmente con camas y sofás blancos, que solemos ver en Blacked (y en Vixen). Una imagen algo más sucia, más nocturna, cosa que comprobamos en su anterior aparición en ella: vacaciones de Kendra Sunderland. Vuelve a haber sexo interracial, vuelve a haber un trío, y vuelven a ser dos actores sólo para ella. A los de Greg Lansky quizá se les agotan un poco las fórmulas o las combinaciones para variar la escena de la de Oregón, pero mientras esté ella en pantalla parece que todo va bien. Aún no sabemos si le quedan algunos pasos por dar, como iniciarse en el sexo anal, algo que toda la comunidad fan de Kendra va pidiendo a gritos. Es probable que cuando acabe el contrato de exclusividad firmado con ellos, deje el porno, así que las fantasías o ganas por ver fetiches y prácticas concretas con ella van agotando la cuenta atrás. Qué bien le quedan estos filtros y estas luces, no tan inmaculadas ni neutras, llanas, sino un poco de trash donde verla bien ocupada de principio a fin. Son escenas muy morbosas por las imágenes de smartphone que hay en el previo al rodaje (aunque formen parte del propio rodaje), que le dan ese toque amateur que a veces faltan a este tipo de producciones. ¡A disfrutar! Cosa que los tres protagonistas parecen haberse tomado muy en serio, cómo no.

Teníamos tres trabajos de Kendra Sunderland pendientes, ya sabéis que seguimos su carrera en el porno incluso antes de que la iniciara. De esas tres, dos nos interesan especialmente; una porque el actor es sevillano, el español Chris Diamond; y la otra, que es ésta, porque visualmente es la más distinta que ha hecho hasta ahora, aun siendo de Blacked (BlackedRaw) tiene un aire amateur gracias a ser una especie de «un día con una pornstar», donde podemos verla fuera del set, haciendo cosas cotidianas siempre con una cámara encima (aunque sea de smartphone). Echad un vistazo a las capturas antes de descartar el vídeo, porque seguro os da ganas de verlo. Gracias a esto podemos ver a una Kendra mucho más natural, siempre dentro de ese tono sofisticado, pero una escena más guarra, fuera de esos sets neutros y asépticos en los que rueda con Vixen. Este vídeo es, junto a su gangbang interracial, el trabajo que más he disfrutado de ella, tan magnífica y morbosa.